Mezclar orígenes, variedades o perfiles de tueste para crear un café original es un arte. Los maestros tostadores hacen mezclas o blends de café para satisfacer el paladar de los consumidores, uniendo sabores y texturas complementarias con tal de crear una marca de calidad que cautive el paladar de los más exigentes. A pesar de que la mayoría de los consumidores de café son bastante puristas y dicen preferir un café de un solo origen o variedad, desconocen que la mayoría de los cafés que se venden en el mercado son blends o mezclas.
La “regla de oro” de un blend es que que debe ser mejor que sus componentes por separado, esto se logra ya que en una mezcla de cafés se obtiene un resultado de sabor balanceado y complejo, al mismo tiempo que se pueden distinguir los mejores rasgos de sus elementos individuales. La creación de un blend debe ser rigurosa: primero, no se deberían mezclar más de 5 tipos de café, y segundo, deben ser elegidos con cuidado ya que si su tamaño o densidad son demasiado diferentes, la molienda, la extracción y el filtrado pueden resultar muy mal.
Para sacar un blend al mercado es importante someterlo a pruebas reiteradas de degustación, para afinar el sabor según el gusto de los consumidores. Eso es lo que hicimos con nuestro blend Colombia Antioquía, que tiene como base un grano Colombia Antioquía lavado y otro Colombia Natural.